Agosto 23 del 2022 LOCAL-disminuye-en-un-50--por-ciento-los-casos-de-dengue-en-cali
La Personería Distrital de Santiago de Cali abrió investigación disciplinaria contra varios funcionarios de la administración caleña por no reinstalar el monumento a Sebastián de Belalcazar "tras siete meses de su restauración".
Los funcionarios involucrados son el Secretario de Cultura, Ronald Mayorga Sánchez, el Subsecretario de Patrimonio, Bibliotecas e Infraestructura Cultural, Leonardo Medina Patiño, el Exsecretario de Seguridad y Justicia, Carlos Javier Soler Parra, el Secretario de Seguridad y Justicia (e), Jimmy Dranguet Rodríguez, el Secretario de Infraestructura, Néstor Martínez, el Director del Departamento Administrativo de Planeación, Roy Alejandro Barreras Cortés, y el Director del Departamento Administrativo de Hacienda, Fulvio Leonardo Soto Rubiano.
Los altos funcionarios distritales presuntamente habrían incumplido "el deber funcional de resguardar el patrimonio cultural de Distrito como es el monumento Estatua de Sebastián de Belalcázar, al no restablecer de manera oportuna un bien mueble de interés cultural, tras siete (7) meses de su restauración, de acuerdo con la Constitución Política de Colombia, la Ley 397 de 1997, el Acuerdo 0373 de 2014 y el Decreto Extraordinario No. 411.0.20.0516 de 2016, que obligan al Distrito a preservar el patrimonio cultural compuesto por bienes y valores materiales e inmateriales, muebles e inmuebles existentes en la ciudad", afirmó la Personería Distrital de Cali.
Cabe recordar que en seguimiento adelantado por la entidad, se encontró que el monumento estaba restaurado y listo para ser reinstalado en su sitio original desde diciembre del año 2021, y en vista a que no se observó gestión por parte del Distrito para este fin, y siendo el monumento Estatua de Sebastián de Belalcázar un bien mueble de interés cultural sujeto de especial protección, la Personería emitió una acción preventiva el pasado mes de marzo del 2022, para que se adelantaran las gestiones administrativas, operativas y presupuestales para devolverlo a su pedestal. Por lo que, en atención a este llamado, el Distrito emitió el decreto 4112.010.20.0146 de 2022 en el que se ordena a distintas entidades de la Administración la reinstalación del monumento, sin que a la fecha se haya logrado su cometido.
Con la apertura de la investigación, el ente de control busca verificar la ocurrencia de los hechos, determinar si son constitutivos de falta disciplinaria, esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que se habrían cometido y la posible responsabilidad de los funcionarios vinculados.
Por su parte, el alcalde cali Jorge Iván Ospina condicionó la reinstalación de la escultura a la instalación de una placa.
"Hasta que no tengamos la placa que efectivamente el propio monumento oriente esos significados, no será instalado Sebastián de Belalcázar", manifestó Jorge Iván Ospina Gómez.
Igualmente se dio a conocer el texto de la mencionada placa:
“Época violenta de la Conquista en la que los conquistadores españoles, buscando riquezas y poder, doblegaron a los indígenas dueños de este territorio. Los herederos de esos antepasados indígenas grabamos aquí, en el pedestal de la estatua del fundador de la ciudad de Cali, Sebastián de Belalcázar, nuestro reconocimiento y exaltación del valor y heroísmo que demostraron con su sangre los pueblos indígenas de Timba, Guales, Xamundí, Bichicama, Amayme, Vixes, Muhlaló, Cachibí, Ambichintes, Bitaco, Dagua, Atuncelos, Yumbo, Gorrones, Calimas, Lili, Chinches, Bolo, Pance, Polo y Petecuy”, dice la nueva lámina.
Lo cierto es que habrá tema para mucho tiempo. Involucrado están aspectos legales, antropológicos, históricos y de identidad. Como dicen algunos analistas "El Belalcázar hace parte de la caleñidad. Y son los caleños quienes deben decidir sobre sus símbolos. No es por ninún motivo aceptable que grupos que no se reconocen como "caleños", llámense indígenas, antioqueños, guajiros, españoles, o como se llamen, deseen imponer sus significados sobre la caleñidad".
Es decir, una cosa es que los caleños producto de un amplio debate y reflexión, donde se incluyan historiadores, universidades, gremios, antropólogos, indígenas, concejales, lideres sociales y la población caleña en general, decidamos resignificar uno de nuestros símbolos como es el Sebastián de Belacázar, a través de una placa o cualquier otro elemento, y otra cosa es que se quiera imponer un significado por decreto, o a través de un acto vandálico, sea éste justificado o no; lo cual da para otro debate.
Para finalizar, hay quienes opinan que este es un desgaste innecesario por parte de la administración caleña.
"Eso es como si el día de mañana a las directivas del América se les da, por decreto, quitar el diablo como símbolo de la institución. O como si decidieran colocar en el escudo una leyenda que diga: 'No es un juego usar al diablo, símbolo de la muerte de los líderes sociales, de los secuestros, de la trata de personas, de las violaciones sexuales, de las guerras y de toda la maldad del planeta Tierra, como caricatura del buen fútbol'"...